A esta tía le llama su novio y le dice que no va a ir a verla porque tiene que trabajar. La tía está muy cachonda y tiene muchas ganas de echar un polvo, así que va a casa de su vecino negro a ver si puede ayudarle. La tía llama a su casa y entra sin permiso, poniéndole muy cachondo meneando su culo encima de su polla. Se pone de rodillas delante de él, le saca la polla del pantalón y chupa con ganas, metiéndosela hasta el fondo de la garganta. El tío se pone muy caliente y, a pesar de tener mujer, no puede evitar darle placer a esta zorra. La tía se pone encima de él y empieza a cabalgarle con su enorme culo, moviéndose rápidamente. El negro le mete todo el rabo dentro del culo y la revienta, dándole mucho placer. La zorra no para de gemir y gritar de placer hasta recibir su dosis de leche por toda la cara.