Los padres de estas dos amigas se han ido de viaje y las han dejado a las dos solas. Las chicas son unas preciosas rubias a las que les encanta el sexo, así que disfrutan teniendo sexo lésbico, aunque no son lesbianas. Conocen a un tío cuando van a ver una casa para alquilar y les encanta. Al final se quedan con la casa y un día viene el tío sin avisar y se las encuentra comiéndose el coño una a la otra. Se pone cachondísimas y las chicas le dicen que se una a ellas. Empiezan a comerse la boca los tres y la temperatura sube cada vez más y más. Las chicas le sacan la polla del pantalón y se la comen entre las dos, empapándola en saliva y poniéndola muy dura. Una de ellas se tumba y el tío le folla la boca mientras que la otra le lame el culo, dándole muchísimo placer a su casero. Una de las chicas se pone encima de él y el tío le mete toda la polla en el culo, reventándoselo, rompiéndoselo entero pero a ella le encanta. Se mueve encima de él y gime como una perra cachonda mientras le come la boca a su amiga. Ahora es el turno de la otra y también le abren el culito. Los tres se lo pasan de maravilla hasta que las chicas reciben toda la leche en la boquita.