Esta chica ha decidido entrenarse para poner su cuerpo duro y ha contratado a un entrenador personal, pero lo que ella no sabía es que él le iba a gustar tanto. Es un negro que viene a su casa y la entrena y ella se pone muy cachonda. Un día decide zorrear con él para follárselo y el tío no puede resistirse. Ella empieza a desnudarle y se pone de rodillas delante de él. Le saca la polla del pantalón y empieza a comérsela toda, metiéndosela hasta la garganta. La agarra con la mano y chupa con ganas, disfrutando de esa enorme polla toda para ella. El tío le quita la poca ropa que lleva y le come la boca mientras masturba su coñito para que se moje bien. Abre sus piernas y lo lame para mojarlo con su saliva y follarla duro. La chica vuelve a bajar hasta su polla y se la traga entera, notando toda la erección en su garganta. Se pone encima de él y empieza a cabalgarle, saltando rápido encima de su polla enorme. Gime como una perra y suplica que se la meta toda dentro de ese pequeño coñito y que la reviente. El negro la pone a cuatro patas y le da muy duro, follándola sin piedad como a ella le gusta hasta que no aguanta más y se corre en su boca.