Este tío ha estado estudiando en otro país y por fin vuelve a casa. Al llegar a casa no hay nadie, así que se mete en su habitación y se la encuentra rosa. No sabe ni lo que está pasando y al abrir los cajones encuentra ropa interior de una chica. De repente la tía entra en su habitación y le dice que es su nueva hermanastra y que esa ya no es su habitación. Al día siguiente por la mañana el tío se la encuentra tirada en el sofá rodeada de botellas de alcohol. El tío le echa la bronca porque es su alcohol pero los dos se ponen muy cachondos. El tío le dice que le folle porque sino se lo dirá a sus padres y la chica lo hace. Le saca la polla y se la mete en la boca. Chupa muy bien, metiéndosela hasta la garganta, lamiendo sus huevos, pajeando su polla. Otro día la chica llega a casa y empieza a hacer ejercicio delante de él, enseñándole su precioso cuerpo para provocarle. Se arrastra hasta él, le saca la polla y el tio no aguanta más. La tumba en el sofá y lame su coñito para mojarlo bien. La pone a cuatro patas y la folla duro, metiéndole toda su polla, haciéndola gemir como una perra cachonda. La tía se sube encima de él y le cabalga rápido, hasta que se pone de rodillas y suplica su leche. El hermanastro acaba corriéndose dentro de su boca y ella se lo traga todo.