Nikki Benz es sinónimo de pornostar con clase. Su cuerpo curtido en cientos de escenas sabe perfectamente que hacer en cada situación, y no hace falta que salga follando para que nos muestre una escena sensual que ponga cualquier polla en erección. La podemos ver duchándose enseñando esas enormes tetas operadas, como se las lava y se pasa las manos para frotárselas con espuma y jabón. Una vez que su escultural cuerpo está limpio el masajista comienza a masajearla con sus manos fuertes. Pero está tan buena que el hombre no puede evitar empalmarse y ponerle la polla en la cabeza sin darse cuenta. La deformación profesional de Nikki hace que se la meta en la boca, no lo puede evitar, polla que ve polla que chupa por inercia, ya son tantas escenas porno que no sabe distinguir la realidad de la ficción. Que bien chupa la polla, sobre todo viendo sus tetas aceitosas botando cuando se la come. Y cuando el masajista se la sube a la camilla y le folla su culo gordo es para flipar ver el cuerpo perfecto que tiene. Como la coge de su gran culo mientras le rebotan las tetas en la cabeza, así cualquiera se corre.