Esta preciosa jovencita se acaba de duchar y se está arreglando y su hermanastro la espía desde la puerta. Entra en el baño y habla con ella. La chica se enfada porque la ve desnuda y le pide poder tocarla. Se pone cachondísimo viéndola y se saca la polla dura. Toca el precioso cuerpo de su hermanastra y la pone muy cachonda. La chica se pone de rodillas y chupa su polla, metiéndosela toda hasta la garganta, empapándola con su saliva. El tío se la lleva al dormitorio y la folla a cuatro patas hasta darle toda la leche en la boquita. Al día siguiente su hermanastra se le acerca y le pide su polla. Vuelve a ponerse de rodillas delante de él y le hace una tremenda mamada hasta que se corre. Otro día se encuentra a su hermanastro haciendo ejercicio y le propone otro tipo de ejercicio. Se desnuda par él y el tío la revienta con su polla gorda, follando ese pequeño coñito húmedo. La chica agarra su polla con la mano y la pajea rápido mientras la chupa y se traga toda su leche.