Estudiante negra se fue de Erasmus para pillar cacho en Francia. Era una mujer negra estudiante de la universidad, cursaba enfermería y como muchas mujeres hacen se tienen que ir al extranjero para poder follar a gusto, de lo contrario la ponen a parir en el pueblo. Ha alquilado una habitación de estudiantes en un piso céntrico de Paris, la ciudad del amor y el sexo desenfrenado. Su compañero de piso es un hombre blanco y joven, algo que ella no ha probado y decide chuparle la polla blanca para saber cómo sabe. Ella solo está acostumbrada a follarse pollones negros de 25 centímetros, le duele mucho meterse una polla como esa por el coño. Las pollas de los blancos entran mejor y más suave, no duele y permite follar más rápido y fuerte. El sabor del pene también es distinto, lo siente mientras se la chupa a su compañero de piso. Le hace una mamada mientras lo graba con el móvil. La negra es delgada y esbelta lo que le permite follar en muchas posiciones sexuales, se pone a cabalgar montada encima del chaval con la polla toda metida dentro de su vagina. Le gustó mucho el orgasmo que tuvo al follarse a un blanco