Esta jovencita pelirroja vuelve de fiesta por la mañana y la pilla su padrastro. Ella se creía que iba a llegar por la mañana y que nadie se iba a dar cuenta, pero la pillan. El padrastro va a la habitación y empieza a echarle la bronca por haber llegado por la mañana. En realidad, ella estaba castigada y no podía salir, pero ha salido y encima ha vuelto por la mañana. Empiezan a discutir y él la pone contra la cama. Luego la pone encima de sus rodillas, le baja los pantalones y le da en el culo con un libro, dejándolo muy rojo. Ella suplica que no la pegue, que no volverá a portarse mal, pero él sigue. Luego empieza a darle golpes en el coñito y le mete los dedos dentro, empezando a masturbarlo muy fuerte. Ella se resiste, pero está encantada, incluso gime cuando él le mete los dedos y la azota. El padrastro se saca la polla y la obliga a comérsela. La pelirroja abre la boca y la chupa como una buena chica, metiéndosela hasta el fondo de la garganta. La tumba en la cama boca abajo y le folla la boca hasta que le dan arcadas. Luego la pone a cuatro patas y la folla muy fuerte, metiéndole la polla hasta el fondo del coño y azotando su culito. La pone de lado y le da muy fuerte por el coño. Le mete la mano en la boca para que no grite y no puedan escucharla. Cuando termina de follarla, la pone de rodillas y le da toda la leche en la boca.