Todos los padres que tienen hijas adolescentes colegialas deben preocuparse mucho por la sexualidad de sus hijas. Hoy en día donde todos los tíos quieren follar con chicas jóvenes cualquier medida es poca, por eso este padre protector puso una cámara oculta en la habitación de su hija, para comprobar que no mantenía relaciones sexuales con nadie. Un día fue a su habitación acompañado de su profesor porque según ella decía necesitaba de unas clases extraescolares. Pasaron ahí dentro encerrados más de una hora a solas los dos, cuando salieron el padre los vio muy contentos y felices y a ella con todas las mejillas rojas. Sospechó en el primer momento de ese profesor así que fue a visualizar el video grabado de forma oculta de su habitación. Cuál fue su sorpresa que nada más darle al play estaba su hija comiéndole la polla al profesor. Y no solo eso sino que también le metía la polla por su coño mientras ella mordía la almohada para no gritar. La muy guarra de su hija se dejaba follar por un hombre que le doblaba la edad. El padre loco de rabia e indignación fue directo a casa del profesor para pegarle por haberse follado a su hija.